Puede resultar complicado saber cuándo le queda poco líquido a tu cartucho de vapeo, especialmente si no tiene una luz roja de advertencia transparente ni un indicador. Por lo tanto, es posible que veas algunas indicaciones que te indiquen que es hora de rellenarlo. En primer lugar, es posible que notes que sale menos vapor cuando das una calada. A veces, no saldrá vapor o sentirás un sabor a quemado, lo cual no es muy bueno. El color del líquido incluso puede cambiar. Si no tienes idea de si tu cartucho está vacío o no, una buena opción es dar unas caladas. Si no ves vapor, es probable que tu cartucho esté vacío.
Una vez que hayas visto que tu cartucho no tiene líquido para rellenar, tienes algunas opciones para elegir. Por lo general, se reemplaza por un cartucho nuevo precargado, disponible en tiendas, o se rellena uno en casa con líquido para vapear. Si rellenas tu cartucho, asegúrate de seguir las instrucciones con mucho cuidado. Es fundamental utilizar el tipo correcto de líquido para vapear diseñado para tu dispositivo en particular. Eso podría ayudarte a evitar problemas y obtener una buena experiencia de vapeo.
Los vaporizadores con cartuchos vacíos tienen sus ventajas y desventajas, así que empecemos por lo bueno. Por un lado, pueden ser una opción más económica que los cartuchos precargados. Ahorras dinero, ya que son reutilizables y se pueden rellenar cuando quieras. ¡Es como recibir una botella nueva cada vez, en lugar de usar una botella reutilizable! Otra cosa increíble de los vaporizadores con cartuchos vacíos es que te permiten un control mucho mayor sobre el e-líquido que utilizas. Esto te permite seleccionar el sabor y la intensidad que quieres, lo que significa que puedes vapear de una manera que te resulte especial.
Pero también hay aspectos negativos. Sin embargo, la recarga de cartuchos puede ser un poco lenta y complicada. Debes tener mucho cuidado de no llenar demasiado el cartucho, ya que puede tener fugas y crear otros problemas molestos. Además, los vapes con cartuchos autocargables pueden no ser capaces de competir con los precargados en cuanto a comodidad. Con los cartuchos precargados, todo lo que tienes que hacer es introducirlos y listo, mientras que con los vapes vacíos, necesitas tener e-líquido a mano, junto con algunos conocimientos sobre cómo rellenar correctamente el cartucho.
Paso 1: retira con cuidado la boquilla del cartucho vacío. Después, carga el e-líquido de tu elección en el dispositivo de llenado. Vierte el e-líquido en el cartucho de forma lenta y cuidadosa, asegurándote de que no se desborde. Si lo llenas demasiado, puedes ensuciar el interior o provocar fugas en el exterior. Vuelve a colocar la boquilla una vez que el cartucho esté lleno y vuelve a conectarlo al dispositivo. ¡Ahora puedes disfrutar de tu vaporizador personalizado!
Cartuchos rellenables: estos cartuchos se pueden rellenar varias veces y suelen ser más baratos que los que vienen precargados. El e-líquido también está disponible en botellas más grandes, lo que significa que pagas menos que si compras varias cápsulas pequeñas precargadas. No solo eso, usar cartuchos vacíos en los vaporizadores reduce el desperdicio. Esto significa que, en lugar de simplemente desechar un cartucho vacío, cuando te quedas sin e-líquido, puedes usar el mismo cartucho una y otra vez, lo que es mucho más ecológico.
Quizás la mayor ventaja que ofrecen los vaporizadores con cartuchos vacíos es la libertad de personalizar tu experiencia de vapeo. Con los cartuchos precargados, tienes que limitarte a los sabores y concentraciones de nicotina disponibles para esa marca. Por otro lado, los vaporizadores con cartuchos vacíos te permiten usar muchos tipos de e-líquidos. También puedes combinar sabores e inventar tus propias mezclas únicas. Esto significa que cada vez que recargas tu cartucho, ¡puedes probar algo diferente!